En el siguiente artículo encontrarás algunas técnicas asertivas para poner en práctica en situaciones hostiles, manipulativas, críticas… Pero antes, podrás conocer los estilos de respuesta que existen dependiendo del tipo de conducta de la persona.
Dependiendo de la situación que vivamos se puede dar una respuesta agresiva, pasiva o asertiva.
Conducta agresiva
Con esta conducta la persona defiende de forma inapropiada sus derechos y opiniones, al igual que infringe los ajenos. La comunicación verbal agresiva suele ir acompañada de insultos, amenazas y gestos hostiles. El objetivo de comportarse así es conseguir dominar e imponerse. De esta forma, se consigue que los demás tengan problemas para expresar sus ideas, derechos y necesidades. Este comportamiento, a largo plazo, suele ir acompañado de sentimiento de culpa. En las conversaciones eleva la voz y habla sin escuchar, su mirada es fija e intensa con el ceño fruncido, sus movimientos corporales son amenazantes, mantiene los puños cerrados y, en situaciones extremas, pueden llegar a agredir físicamente al otro.
Conducta pasiva
La persona transgrede sus propios derechos, creencias y opiniones al no expresarlos de forma abierta. Porque o no los conoce o no los considera importantes para los demás. Manifiesta falta de confianza, cediendo ante divergencias de opiniones. Esto demuestra falta de consideración ante sus propias necesidades. Su interés se centra en evitar conflictos y apaciguar los ánimos de los demás. Esto produce en la persona sentimiento de incomprensión, manipulación y exclusión. Suele mantener la mirada baja en las conversaciones, habla con poca fluidez y con un tono bajo, emplea muletillas y sus movimientos corporales son nerviosos y tensos.
Conducta asertiva
Es un estilo de conducta positiva y funcional. En la que, la persona expresa sus derechos, pensamientos, sentimientos y creencias con firmeza. Sin pisar los derechos ajenos, de forma adecuada y en el momento apropiado.
La persona asertiva mantiene un alto grado de aceptación incondicional de sí misma y de los demás como personas únicas. Puesto que, es un comportamiento empático, se pone en el lugar del otro respetando sus sentimientos y opiniones. En las conversaciones suele mantener un contacto visual directo, gestos agradables (pero firmes) con una postura erguida y relajada. Los mensajes son en primera persona y de forma directa.
Técnicas asertivas
La base de toda técnica asertiva es el respeto hacia uno mismo y hacia los demás, pero siempre sin perder de vista nuestros deseos y necesidades.
- Disco rayado. Consiste en la repetición de tu afirmación, una y otra vez, sin elevar la voz, sin agresividad, ni detonar sarcasmo o ironía. Por ejemplo:A: Ven a la fiesta esta noche, verás cómo lo pasamos genial.
B: No gracias, esta noche no me apetece salir.
A: Va, anímate y vamos a la fiesta.
B: No, gracias. Esta noche no me apetece salir.
A: Bueno como quieras.
– – – – – – – – – – – – – – – – –
A: ¿Me dejas tu ordenador, por favor?B: No puedo, lo necesito.
A: Venga, déjamelo, es súper importante.
B: No puedo, lo necesito.
A: Vale, gracias de todos modos.
- Banco de niebla. Esta técnica ayuda a responder a críticas manipulativas, estableciendo la posibilidad de que pueda ser cierta. Así, da la razón a una persona en aquello que consideras que tiene razón, pero de un modo parcial, sin dejar tu postura de lado y manteniéndote firmes en tu punto de vista. Por ejemplo:A: Ayer llegaste tarde de pasear con los amigos.
B: Sí, es cierto llegue tarde, estaba con los amigos.
A: No me gusta que llegues tan tarde.
B: Es cierto que no te gusta, lo estaba pasando bien y no vi que fuera tan importante venir más tarde.
– – – – – – – – – – – – – – – – – –
A: Últimamente estas muy ocupada y no sales conmigo.
B: Es verdad, estoy teniendo mucho trabajo y no tengo tiempo.
- Aserción negativa. Comprender que todos tenemos derecho a equivocarnos y aceptar nuestros errores, sin tener que excusarnos por hacerlos. Responde a una crítica reconociendo que es totalmente, o en parte, verdad, hasta que la otra persona deje de recriminarte.A: No le has puesto sal a la tortilla ¡Qué desastre!
B: Es cierto, no le he puesto sal.
A: Nunca te acuerdas de ponerle, tienes que espabilar.
B: Sí, es verdad que nunca me acuerdo.
– – – – – – – – – – – – – – – – –A: Otra vez llegas tarde, siempre haces lo mismo.
B: Sí, es verdad, llego tarde.
A: Eres muy informal y me molesta mucho.
B: Es cierto soy muy informal.
- Técnica del sándwich. Expresamos algo positivo antes y después de transmitir nuestro punto de vista. De esta forma rechazar una petición y no resulta tan molesta a la otra persona. Por ejemplo:A: Te invito a cenar esta noche.
B: ¡Gracias por invitarme! Hoy no me es posible, pero podemos aplazarla a otro día.
- Asertividad positiva. es el reconocimiento de lo positivo y valioso de los demás. Consiste en expresar de forma verbal y no verbal el afecto y aprecio por otras personas.A: Has realizado un trabajo genial, la calidad de tu exposición ha sido magistral.
B: ¡Gracias! Eres muy amable.
- Aplazamiento asertivo. Busca tiempo para dar la respuesta. Aplazarla para un momento en el que te sientas capaz y con control para responder. También puedes aplicar esta respuesta cuando tú interlocutor esté comunicándose de forma agresiva.A: Estoy esperando a que me contestes.
B: Ahora mismo estoy muy ocupado y tengo el tiempo justo para ir al trabajo. Te propongo aplazar la conversación.
Cuando te encuentres en una situación similar a las descritas anteriormente, intenta poner a prueba cualquiera de las técnicas mostradas. Puede que al principio te encuentres en una situación poco natural, pero si las practicas verás cómo las vas interiorizando y se convierten en herramientas útiles de tu repertorio de respuesta asertiva.
